a

JOAQUINA DE VEDRUNA

CONÓCENOS

“Haced todo por amor, nada por fuerza”

Santa Joaquina de Vedruna fue la fundadora de la Congregación Hermanas Carmelitas de la Caridad Vedruna, nacida en Vic (España) el 26 de febrero de 1826. Natural de Barcelona y educada en un ambiente familiar muy cristiano, se sintió siempre atraída por Dios. Casada con un joven de Vic, Teodoro de Mas, se amaron profundamente y se entregaron ilusionados a la tarea de educar a sus nueve hijos.

Prematuramente viuda, Joaquina dedicó lo mejor de sí misma a sus hijos y a los enfermos pobres de la ciudad de Vic, y decidió entonces a acabar sus días como religiosa, en la pobreza y la oración.

Cuando, ya mayores sus hijos, parecía llegado el momento del retiro a la vida monástica, el Señor le mostró, a través de providenciales circunstancias, el camino hacia una meta nueva: poner en marcha una congregación religiosa “para abrazar las necesidades de los pueblos, ya para cuidar enfermos, ya para la enseñanza de las niñas”, como ella misma decía.

Deseosa únicamente de “emprender lo que el Señor quiera”, “dispuesta para hacer su voluntad”, reunió hermanas e inició con ellas un nuevo modo de vida religiosa al servicio de las clases populares.

La infancia y la juventud, los marginados y los enfermos, encontraron en ella acogida y respuesta a sus necesidades.

Murió en Barcelona, víctima del cólera, en el verano de 1854, dejando tras sí numerosas comunidades que, herederas de su carisma, son hasta hoy las continuadoras de su obra en la Iglesia.

“Madre de nueve hijos – dijo de ella Juan XXIII – se convertirá en madre de innumerables pobres”. Él mismo, en 1959, añadía el nombre de Joaquina de Vedruna a la lista de los testigos ejemplares del Señor, a la lista de sus santos.

Nacimiento

Fundación

Muerte

Canonización